Ouya, la consola de 99$ basada en Android

 

Ouya será una realidad, en menos de 24 horas se han superado los 950.000 dolares y la cifra sigue subiendo. El lanzamiento de la consola sigue previsto para el primer trimestre del 2013.

En los últimos días ha salido a la luz Ouya, una nueva consola basada en Android que podría poner a prueba la forma en la que Sony, Microsoft y Nintendo están llevando a cabo sus negocios en el mundo de los videojuegos. Julie Uhrman, de IGN y fundadora del la iniciativa, está impulsando este proyecto con el respaldo de Yves Behar, conocido por el programa One Laptop Per Child, Muffi Ghadiali, que trabajó en el Kindle de Amazon y Ed Fries, antiguo responsable de las relaciones en la industria para la consola Xbox.

    Julie Uhrman en declaraciones a Kotaku escribió:No creo que los fabricantes de consolas estén muertos. Simplemente creemos que es hora de repensar cómo dirigen su negocio. No nos gusta cuando la gente paga 60$ por un juego y se siente engañada. No nos gusta cuando los desarrolladores no pueden trabajar en una plataforma por que es demasiado cara.


Ouya es una consola totalmente hackeable cuyo desarrollo de juegos está dirigido tanto a indies como a grandes empresas. La consola está completamente abierta al desarrollo y sus juegos inicialmente deben tener un modo gratuito, ya sea mediante demo o bajo el modelo free to play. Aquellos interesados en desarrollar periféricos o aplicaciones también podrán hacerlo libremente.

Para sacar adelante el proyecto se recurrirá a la financiación colectiva publica y hoy mismo se ha iniciado en Kickstarter la recaudación de dinero. Aquellos que prometan dar un mínimo de 99$ recibirán la consola (SDK incluido), cuyo lanzamiento (si se consigue la financiación) está previsto para marzo de 2013.

Especificaciones de Ouya

    Tegra 3: Quadcore ARM CortexA9 + GPU
    1 GB LPDDR2 RAM
    8 GB on-board flash
    Conexión HDMI 1080p HD
    WiFi 802.11bgn
    Bluetooth LE 4.0
    Carcasa que se abre con destornilladores estándar
    Sin disco duro

Controlador

    Mando Wireless con 2.4Ghz RF
    Controles estandar (dos sticks analogicos, d-pad, 8 botones de acción, botón de sistema)
    Touchpad
    2x AA batteries
    Carcasa que se abre con destornilladores estándar

Sistema operativo y Software

    Android 4.0
    Custom TV UI
    Integración con la store de juegos, búsqueda y descarga de juegos o aplicaciones
    Incluye el SDK para el desarrollo de juegos
    Capacidad de rootear el dispositivo sin perdida de garantía

Raspberry Pi

Pocos proyectos hay tan emocionantes como Raspberry Pi. Ya hemos hablado de ella en otras ocasiones, pero si acaso no sabes de qué hablo, te cuento que es una especie de mini (¿micro?) computadora diseñada expresamente para la educación:

Promover el estudio de las ciencias de la computación y temas relacionados, especialmente a nivel escolar, y regresar la diversión al aprendizaje de la computación.

Raspberry Pi es un proyecto cocinado desde hace 6 años, con académicos e ingenieros ingleses con la idea inicial de entusiasmar a sus alumnos más pequeños en la programación y construcción de computadoras. Pero lo que comenzó siendo una memoria USB con un puerto HDMI en un extremo, hoy es una PC completa, hecha toda un producto comercial que está causando sensación en la red.
El pasado 29 de febrero fue la fecha marcada para el lanzamiento comercial de Raspberry Pi. Con el apoyo de dos de las mayores distribuidoras de componentes electrónicos, fueron producidas 10.000 placas en China que serán distribuidas por todo el planeta. Vienen muchas más en camino. Como resultado, la web del proyecto se vio ahogada por la inmensa cantidad de peticiones para pre-ordenar la placa “Model B” de 35 dólares (ver diagrama; por cierto, la placa “Model A” de 25 dóls. será lanzada en los próximos meses).

Tenemos ante nosotros un proyecto “con ADN abierto”, pensado para compartir y producir conocimiento, que se convierte en un acontecimiento comercial. Un triunfo de la cultura libre que reúne licencias GPL, Creative Commons, con software y hardware libre, inspirado en grandes como Linux y Arduino…
Y así vemos que esta semana el mundo de la tecnología es capaz de ofrecernos dos paradigmas diametralmente opuestos: uno en pos de una economía de consumo vibrante, de obsolescencia programada, representada por el iPad 3 y otro, más humilde, de dineros que irán a parar a causas benéficas, construido sobre una base social como es el Raspberry Pi, que sorprende por su potencial educativo en cualquier contexto socioeconómico, sin patentes, DRMs, ni despachos de abogados de por medio, como debe ser, por lo menos cuando de educación se trata, digo yo.